
En su objetivo por hallar vida en el espacio exterior, científicos de la Nasa dieron a conocer el primer mapa geológico de la luna Titán, del planeta Saturno, en el que se puede apreciar, de acuerdo a los hallazgos, el parecido de ésta con la Tierra, en especial porque cuenta con llanuras, dunas de material orgánico congelado y lagos de metano líquido.
Saturno es el segundo planeta más grande del sistema solar después de Júpiter y se caracteriza no solo por su color dorado, sino también por sus impresionantes anillos que se pueden observar desde la Tierra. Su densidad es menor a la del agua y al estar compuesto en su mayoría por gases, sus condiciones impiden que pueda albergar vida, todo lo contrario a algunas de sus lunas.
De acuerdo con los científicos, Saturno tiene 53 lunas confirmadas, todas ellas con un tamaño y características diferentes. En el caso de Titan y de acuerdo con el artículo que publicó la Nasa en la revista Nature Astronomy, esta luna posee un ciclo hidrológico activo basado en metano, lo que la convierte en un paisaje geológico de los más diversos del Sistema Solar.
Estos resultados se dan a conocer gracias a la elaboración de un mapa geológico de la luna, obtenido a partir de los datos de radares, infrarrojos y la sonda espacial Cassini, de la Nasa.
Esta herramienta permitirá, de ahora en adelante, comprender la interacción de las diferentes regiones encontradas en Titán y su importancia dentro de los procesos que posibilitan la existencia de vida.
Una de las mayores similitudes entre la Tierra y Titán es que ambas poseen atmósfera y presión atmosférica, solo que, en el caso de la luna de Saturno, en su mayoría, está compuesta por hidrógeno.
Así mismo, en su relieve se pueden encontrar montañas, terrenos húmedos, ríos, lagos y mares de etano y metano líquidos que forman nubosidades, provocando lluvias de gas líquido desde el cielo.
Lo que más sorprende es que este satélite posee una gran reserva de hidrocarburos líquidos, superiores a las que posee la tierra en petróleo y gas, condiciones que posibilitan la existencia de vida en este lugar.
De acuerdo con Rosaly Lopes, geóloga planetaria del Laboratorio de Propulsión a chorro de la Nasa, «a pesar de los diferentes materiales, temperaturas y campos de gravedad entre la Tierra y Titán, muchas características de la superficie son similares entre los dos mundos y pueden interpretarse como productos de los mismos procesos geológicos».