
En su debut como local en la Liga de Campeones, el FC Barcelona sufrió una dolorosa derrota en el último minuto ante un PSG imparable, que remontó el marcador y se llevó el triunfo con un gol de Gonçalo Ramos al 90’.
El partido comenzó con magia culé: Lamine Yamal deslumbró con una jugada de fantasía, y Ferran Torres abrió el marcador tras una brillante combinación con Pedri y Rashford. El Barça dominaba y el PSG parecía desorientado, afectado por la baja de Joao Neves.
Pero todo cambió antes del descanso. Un error defensivo permitió el empate de Mayulu, y desde entonces, el equipo de Luis Enrique se adueñó del ritmo. En la segunda mitad, el Barça mostró signos de agotamiento, y aunque Szczesny mantuvo viva la esperanza con varias atajadas, el desgaste era evidente.
El árbitro Michael Oliver dejó pasar una falta que pudo cambiar el rumbo, y ni los cambios de Hansi Flick lograron frenar el avance parisino. Finalmente, Hakimi lideró un contraataque letal y asistió a Ramos, que selló la remontada.
El Barça, que empezó ilusionando, terminó desplomado en su propio feudo, dejando escapar tres puntos que parecían asegurados.
El PSG, por su parte, confirma su poderío y manda un mensaje claro en Europa.