El cometa Lemmon (C/2025 A6), descubierto en enero desde el Observatorio Mount Lemmon en Arizona, se perfila como el fenómeno astronómico más espectacular de 2025.
Esta joya celeste de tono verde brillante, compuesta por hielo, polvo y roca, regresa tras más de mil años de ausencia y no volverá a ser visible hasta el año 3175.
Su órbita retrógrada y altamente inclinada lo hace especialmente visible desde el hemisferio norte, donde alcanzará su punto más cercano a la Tierra —unos 90 millones de kilómetros— entre el 25 y el 31 de octubre, justo en Halloween, ganándose el apodo de “el cometa de Halloween”. Durante este período, podrá observarse a simple vista desde zonas con cielos despejados, aunque binoculares y telescopios revelarán su núcleo brillante y su característica cola verdosa.
A partir de noviembre, los observadores del hemisferio sur también podrán disfrutar del espectáculo al anochecer.
Lemmon representa una oportunidad única para contemplar un viajero del tiempo que conecta el pasado milenario con el presente estelar.

